¡Feliz Navidad! Un mensaje para ti
Si hay algo que debería llenarnos de entusiasmo y gratitud, es recordar que el nacimiento de Jesús estuvo rodeado de personas muy diversas, cada una con un papel único en ese momento histórico. A la luz de la Biblia, vemos cómo Dios reunió a reyes, pastores, ángeles y personas en el templo para ser testigos del evento más grande de todos los tiempos: la llegada del Salvador.
Y hoy, esa historia no ha cambiado. Cada uno de nosotros, con nuestras propias realidades, historias y contextos, hemos sido llamados por Dios para ser testigos de algo aún más grande. No solo celebramos el nacimiento de un Salvador hace más de dos mil años, sino que seguimos siendo testigos de cómo ese Salvador nace una y otra vez en los corazones de las personas a las que servimos.
En nuestras iglesias, encontramos pastores, creativos, técnicos, músicos, maestros y tantas otras manos que trabajan para compartir este mensaje. Somos como aquellos pastores humildes que llegaron al pesebre, como los sabios que ofrecieron sus mejores dones, o como los ancianos en el templo que reconocieron en el niño Jesús la promesa cumplida. Todos servimos de maneras distintas, pero nos une el mismo propósito: proclamar que Jesús es el Salvador del mundo.
Hoy quiero detenerme un momento para agradecerte. A ti, creativo, músico, técnico, líder, voluntario. Tu servicio hace eco del anuncio de los ángeles: “Les traigo buenas noticias que serán motivo de gran alegría para todo el pueblo”. Gracias por invertir tu tiempo, tus talentos y tu pasión en hacer que este mensaje llegue a cada rincón.
Que esta Navidad sea un recordatorio de que tu trabajo no es en vano. Cada acorde que tocas, cada diseño que creas, cada micrófono que ajustas, cada idea que aportas, está apuntando a algo eterno: la gloria de Dios y la salvación en Cristo.
Así como Dios eligió a personas comunes y las hizo parte de Su plan extraordinario, tú también estás siendo usado para algo que tiene impacto eterno. Que este mensaje sea un ánimo para ti y tu equipo: el Salvador sigue naciendo en los corazones de quienes escuchan y reciben el evangelio, y tú eres parte de esa obra.
De parte de todos los que somos testigos de tu esfuerzo, ¡gracias! Feliz Navidad y que el gozo del Salvador llene tu vida y tu ministerio en esta temporada. ¡Sigamos anunciando Su nombre con todo nuestro corazón!
