¿Qué hicimos el año pasado?
Cuando estamos cerca al comienzo de una nueva temporada es muy común que nos emocionemos por empezarla. Ideas como: “Qué importa lo que hicimos el año pasado, lo importante es enfocarnos en los planes que tenemos para nuestro futuro” o “hay que tener visión para el nuevo año, lo importante es dejar atrás el pasado y extendernos a lo nuevo” abundan por todos lados. Muchos creen que no hay nada útil en mirar hacia atrás pero aunque no lo parezca, echar un vistazo hacia el pasado puede darnos muchas herramientas para lo que viene.
En este artículo queremos compartir contigo tres formas en las que mirar hacia atrás puede ser de bendición y traer productividad a tu ministerio.
1.Aprendizaje.
“Aquel que no conoce la historia, está condenado a repetirla”. ¿Has escuchado esta frase anteriormente? Una de las formas en las que podemos aprender a vivir el futuro es cuando evaluamos lo que hemos vivido en nuestro pasado. Al final de cuentas, el lugar en el que hoy nos encontramos es el resultado de la suma de nuestras decisiones, aciertos y errores que cometimos en el pasado.
Es muy común, sobre todo a inicios del año escuchar personas haciendo énfasis en versículos en donde Dios nos anima a tener nuestro enfoque en el futuro y en lo que tiene por delante para nosotros. Sin embargo, si prestamos atención podremos darnos cuenta de que la Biblia también habla sobre la importancia de aprender acerca del pasado.
Recuerda los días pasados; piensa en las generaciones anteriores. Pregúntale a tu padre, y él te informará. Averigua con los ancianos, y ellos te contarán. Deuteronomio 32:7 (NTV)
En el contexto de este versículo encontramos a Moisés enseñando a una nueva generación cómo caminar en la voluntad de Dios. Al hacerlo, no solo les habla de la sabiduría que la palabra de Dios ofrece, sino que también los anima a usar el ejemplo de las generaciones anteriores.
Ahora que estamos comenzando el año es un buen momento para detenernos y reflexionar sobre todas aquellas cosas que nos trajeron a donde estamos el día de hoy (tanto en lo personal como en lo ministerial). Esto nos ayudará a encontrar herramientas muy útiles para seguir avanzando.
Después de reflexionar en el pasado podremos obtener información muy valiosa de todas esas veces que dijimos: “lo hubiera hecho diferente”, “no obtuve el resultado que quería”, etc.
Ahora, es importante no sólo ahondar en nuestras experiencias sino también buscar consejo en las de los demás. Por ejemplo, en el versículo que leímos hace un momento Moisés dijo: “pregúntale a tu padre, y él te informará. Averigua con los ancianos, y ellos te contarán”. Tal como Moisés lo sugiere, somos enriquecidos cuando nos acercamos a alguien más dispuestos a conocer sobre sus propias vivencias.
2. Ubicación
¿No ve él mis caminos, y cuenta todos mis pasos? Job 31.4 (RVR1960)
En este versículo Job habla acerca de la vida como un camino en el que se dan pasos, un camino en el que todos estamos transitando y dando diferentes tipos de pasos. Algunas veces podemos llegar a sentir que damos pasos hacia atrás, otras veces hacia adelante e incluso hay momentos en los que sentimos que estamos estancados en el mismo lugar, en el mismo paso.
Al usar esta ilustración de la vida como pasos que damos, el voltear hacia atrás nos da la capacidad de darnos cuenta de en qué paso, momento o etapa nos encontramos en este momento.
Así mismo podemos hacernos preguntas como: ¿cómo se ve mi vida en este momento?, ¿cómo se ve mi ministerio?, ¿cuál sería la meta final de mi ministerio?, ¿cómo está mi relación con Dios?, ¿cuáles son mis prioridades? Este tipo de preguntas te ayudarán a darte cuenta de en qué paso te encuentras en este momento. Si no pudieras mirar atrás, sería imposible darte cuenta del progreso que haz hecho hasta el momento.
Esto es útil ya que además de darnos claridad acerca de la etapa de vida en la que nos encontramos, nos ilustra respecto a qué tipo de decisiones son necesarias en el presente para seguir dando los próximos pasos hacia el futuro.
3. Agradecimiento
Tales cosas se escribieron hace tiempo en las Escrituras para que nos sirvan de enseñanza. Y las Escrituras nos dan esperanza y ánimo mientras esperamos con paciencia hasta que se cumplan las promesas de Dios. Romanos 15.4
Finalmente, cada vez que miramos hacia atrás podemos recordar que Dios ha estado con nosotros y ha tenido cuidado de nuestras vidas.
Como dice Pablo en el versículo anterior de Romanos, las cosas que se han escrito hace tiempo, en el pasado, nos sirven para que tengamos esperanza y ánimo. Aún si el pasado fuera uno difícil, si el día de hoy tu y yo seguimos de pie es solamente por la bondad de Dios y por su gracia que nos ha sostenido.
Así que, cuando miremos al pasado no olvidemos ver la bondad de Dios que no sólo hasta aquí nos ha traído, sino que nos sigue guiando y cuidando de nuestras vidas ayudándonos a tener un corazón lleno de esperanza, ánimo y gratitud. Finalmente, no olvidemos que echar un vistazo hacia el pasado nos puede llenar de sabiduría para sobrellevar el presente y construir el futuro.