No podríamos argumentar si el hecho de usar o no las redes sociales sea una discusión común. Realmente como sociedad hemos hecho de este tema parte de nuestra normalidad. Todos estamos acostumbrados a la vida con redes sociales siendo una parte presente en nuestra rutina diaria.
Todos las usamos, tanto de una manera personal, como también en otros giros, como lo es en el empresarial, en el artístico, en el informativo, y también en el contexto de la iglesia.
Y como mencionamos anteriormente, la la cuestión no es traer sobre la mesa la idea de usarlas o no, más bien extraer una perspectiva acerca del uso que les damos a las redes sociales como iglesia y como equipos de iglesia.
Aunque es una realidad que no hay una manera perfecta de usarlas, También es una realidad que si existen cosas que pudiéramos publicar que representarían un error para nosotros, sobre todo como iglesias.
Así que queremos compartir contigo cuatro ideas que debemos evitar como iglesia.
1.Que las redes sociales nos usen y no que usemos las redes sociales.
Una realidad es que las redes sociales son una herramienta, una herramienta que nosotros podemos usar y disponer con diferentes propósitos. Pero a medida que han tomado tanta importancia y tanto significado en nuestra sociedad, uno de los errores más grandes que pudiéramos cometer como iglesia a nivel organizacional o aún a un nivel personal, es dejar que las redes sociales nos usen a nosotros, en lugar de nosotros usarlas a ellas.
Realmente esto es algo que hemos visto cada vez más común. Sinceramente creo que es muy peligroso cuando las redes sociales se vuelven no solo una parte agregada en nuestra vida, si no aún una figura autoritativa en las dinámicas de la sociedad.
Hemos visto iglesias sentir la presión de tener que cumplir con ciertos estándares de las comunidades en redes sociales, o aún hemos visto Iglesias sentirse comprometidas a poder mantener un estándar y un testimonio ante las opiniones de toda la comunidad que está conectada en línea.
Esto realmente puede ser una carga imposible llevar, número uno porque debemos de recordar que las redes sociales son meramente una herramienta entretenimiento. No debemos de perder de vista que la redes sociales por decirlo alguna manera no son algo “serio”.
Las redes sociales no sólo son un medio entretenimiento, sino son un medio qué al estar abierto a la opinión de cualquier persona, siempre vamos a estar expuestos a la realidad de qué va a haber personas que opinan diferente y que están en desacuerdo. No debemos de sentir la presión de tener que convencer a medio mundo y tratar de agradar a todos para que nos puedan dar un Like, o puedan borrar algún comentario negativo en alguna publicación.
Recuerda, los likes no significa nada y los comentarios tampoco.
Fuimos llamados a amar a las personas, fuimos llamados a discipular, fuimos llamados A dar un testimonio a otros, pero debemos de recordar, que esto realmente sucede de una manera genuina, no en línea sino con personas con las que podemos ser genuinos y podemos abrir nuestras vidas de una manera humana, y no digital.
Así que debemos recordar, las redes sociales son meramente entretenimiento, no debemos sentir compromiso ni mucho menos peso autoritativo para lograr llegar a ciertos estándares que al final del día realmente nunca van a producir fruto.
2.No abracemos peleas ajenas.
Sólo basta con abrir alguna Red social para ver como siempre los temas polémicos, las discusiones y las divisiones van a estar presentes.
Esto es una parte normal y natural de las redes sociales, pero como iglesia debemos tener mucho cuidado de no caer en la trampa de abrazar una pelea que no nos corresponde.
Pareciera ser que todos los temas y controversias están diseñadas para que todos se sientan con la necesidad de aportar o de dar su comentario, pero la realidad es que esto no es así.
Siendo francos, debemos siempre tener presente la realidad de qué nunca ha existido un verdadero fruto de una discusión o una pelea en redes sociales. Es por esto que debemos evitar la actitud de “justiciero social“ en las redes sociales.
Recuerda, esas discusiones nunca son provechosas.
3.No es lo que estamos en contra, sino lo que proclamamos.
Otra de las tendencias comunes en las que podemos caer, es tratar de ser demasiado explícitos en comunicar todas las cosas de las que no estamos de acuerdo. Pueden ser posturas políticas, ideologías, o posturas sociales.
Por supuesto que no hay nada de malo en tener una convicción personal, o incluso una convicción como iglesia acerca de ciertos temas. El tema no es este en sí, sino más bien extraer perspectiva de qué podamos ser honestos y darnos cuenta qué es muy preocupó vale que alguien realmente pueda experimentar una transformación al ver un comentario negativo de nosotros en el que expresamos todas las cosas en las que no estamos de acuerdo.
Sólo imagínalo una publicación así: “no estamos de acuerdo con el alcoholismo”.
¿ realmente crees, que algún alcohólico a leer esto va a decir: “guau esta iglesia no está de acuerdo con el alcoholismo, Al leer esta publicación me siento realmente arrepentido y quiero conocer a Jesucristo como mi salvador personal“?
Sé que suena un poco exagerado el ejemplo, pero debemos de tener en cuenta que realmente no podemos lograr mucho al expresar todo aquello por lo que estamos en contra. ¿Y que si lo que realmente pudiera traer fruto, es que todos pudieran saber aquellas cosas que queremos proclamar, en otras palabras, y qué tal si es más fructífero proclamar el mensaje de Jesucristo?
4.Siempre seamos reales
Por último, con la llegada de de los filtros, la edición digital, y todas las herramientas que tenemos para editar el contenido en línea, debemos cuidarnos de no sentir la necesidad de fingir ciertas cosas gracias a los filtros hola herramientas que tenemos disponibles.
Debemos tener en cuenta que esta generación es experta en identificar falsedad, o fingimiento. Por lo tanto debemos por supuesto subir contenido de calidad, pero nunca irreal o falso.
Hagamos cosas con calidad, pero también cosas genuinas, lo cual pareciera ser que quizá no sea atractivo para algunos, pero hoy en día realmente lo genuino es una virtud.
Conclusión
Muy probablemente hayan muchas otras ideas acerca de cosas que debemos evitar en la redes sociales, pero queríamos compartir contigo estas cuatro con la intención de qué podamos quitar todo aquello que pudiera restarle al mensaje que estamos tratando de comunicar en diferentes plataformas.
Recuerda que vivimos para comunicar el mensaje de Jesús, y este es nuestro privilegio. Hagámoslo intencional y apasionadamente.