Aunque la adoración es una expresión que brota del corazón de alguien que ha experimentado la bondad de Dios, entendemos que como iglesia, podemos abrir espacios en los que a través de diferentes herramientas como la música, podemos propiciar un espacio en el que servimos a nuestra comunidad, a nuestra iglesia.
Por medio de esta entrada, queremos compartir contigo esta perspectiva de la adoración, siendo un recurso que responde a las necesidades de tu iglesia.
Cuando no respondemos a las necesidades
Antes de entrar específicamente a las necesidades de nuestra iglesia y como podemos responder a ellas, queremos también primeramente exponer una perspectiva en la que no respondemos a las necesidades de la iglesia.
No respondemos a las necesidades cuando:
1.No reconocemos que el ministerio de adoración tiene el propósito de SERVIR a la iglesia.
2.Pensamos que la adoración tiene que ver con un performance musical de canciones de cierto estilo.
3.Creemos que la iglesia tiene que responder a lo que los ministerios de adoración desean.
Sin darnos cuenta, podemos caer en la idea de qué por estar en una plataforma, todos aquellos que no están en ella tienen que seguir lo que sucede en la plataforma. Pero en realidad, aunque la plataforma esté en una posición más visible, en si la plataforma siempre debe tener una posición de servicio. La plataforma sirve y se entrega para el corazón de todos aquellos que no están en ella.
Las necesidades
Ahora bien, cuando hablamos de necesidades, debemos de ser claros acerca de a lo que nos referimos con las necesidades específicamente. Y esto lo respondemos al hacernos la pregunta:
¿Qué necesitan los miembros de mi iglesia?
Y aunque pareciera ser una pregunta complicada de responder ya que todas las personas están viviendo diferentes situaciones, en realidad de una manera general todos tenemos ciertas necesidades en común:
1.Crecer en nuestra relación con Jesús.
2.Conocer la palabra de Dios.
3.Conectarnos con nuestra comunidad.
Quizá pueden venir otras respuestas a tu mente a esta pregunta, no decimos que estas tres sean las únicas, y de hecho sería algo muy útil que podamos pensar en más respuestas para ser más puntuales a la hora de responder estas necesidades. Pero de una manera general, podemos estar de acuerdo que estas son necesidades principal es que todos aquellos que van a una iglesia tienen.
Así qué debemos preguntarnos:
Espacios de devoción
¿El servicio de adoración abre un espacio para la devoción, o solo es un tiempo en el que las personas son expectantes?
Cuándo abrimos un espacio de adoración, siempre hemos de tener en mente que son oportunidades en las que las personas pueden crecer en su devoción a Dios, puede ser con tiempos de oración, tiempos de adoración espontánea, o en fin algún espacio en las que las personas puedan participar personalmente un tiempo devocional con Dios.
Espacios de aprendizaje
¿ El servicio de adoración produce emociones y sentimientos solamente, o realmente hay un conocimiento más profundo de Dios a través de su palabra?
Es sumamente vital que como equipos de adoración, recordemos que las personas constantemente tienen que estar siendo expuestas a la verdad de la palabra de Dios, tanto de una manera cantada, como también de una manera explícita. Ya que ahí encontramos vida, encontramos la verdad acerca de quién Jesús es.
Espacios de comunión
Por último, también debemos recordar la importancia de abrir espacios en los que las personas puedan estar conscientes no sólo es lo que sucede al frente, sino también de quienes están a un lado de ellas.
Esto puede suceder desde algo tan sencillo como un tiempo en el que la gente pueda saludarse y conectar, como está algo más profundo en el que invitamos a las personas a orar unos por otros.
Finalmente
Finalmente, queremos una vez más hacer este énfasis, los ministerios de adoración tienen el propósito de servir a la gente para que puedan conocer más a Dios, pueden conocer su palabra, y puedan profundizar en su comunidad como iglesia.
Servimos a Dios, y servimos a la iglesia.
